Robert de Niro nació para este papel. Ya sé que cuenta en su haber con memorables actuaciones que han pasado a la historia del cine. Sin embargo me quedo con esta actuación, tan natural y sin estridencias, con la cual uno queda deseando tenerlo como tío o ser como él de mayor. Y no sé si me refiero al actor o al personaje.
Como tantas veces, lo que se presenta como una simple comedia tiene mucha más miga de lo que aparenta, y esta película da que pensar en relación con la falta de humanidad en el cada vez más común modelo de negocio electrónico, tanto a un lado como al otro de las transacciones. Todo ello con el trasfondo de una decisión cuyo desenlace descoloca al espectador de tal manera que el debate sige después de salir del cine - no está mal para lo que parecía una superficial comedia.
No es de menor importancia la magnífica actuación de Anne Hathaway, también una acertadísima elección para su papel.
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